Harlem está situado al norte de Manhattan, comienza una vez acaba Central Park por el norte y llega casi hasta el fina de la isla. Con esto quiero decir que es enorme, pero podemos centrarnos en una parte de Harlem para captar la esencia y experimentar cómo es la vida de este barrio. A diferencia del resto de Manhattan, Harlem es un barrio donde la gente “normal” vive, con normal me refiero al nivel económico. Os podéis imaginar lo que cuesta un alquiler (por no hablar de compra) de un piso en los barrios de Manhattan como Chelsea o los del Village, no puede permitírselo cualquiera.

En Harlem se hace la vida del día a día. Los comercios son los que se necesitas para satisfacer las necesidades del barrio, supermercados y tiendas para la compra diaria, restaurantes, cafeterías, servicios como colegios y hospital ¡o las típicas lavanderías que tantas veces hemos visto en las pelis! Es un lugar para vivir.

Cuando fuimos a Nueva York, decidimos alquilar un apartamento por AirBnb en Harlem por dos motivos. El primero porque costaba la mitad que en el Midtown y lo segundo, queríamos conocer la vida real de Nueva York, cómo vive un neoyorkino auténtico y no los ricachones de las películas. La experiencia no nos defraudó en absoluto. Si queréis también alojaros en un apartamento así, tenéis un descuento de 35€ en tu primera reserva registrándote en AirBnb desde aquí.

Pero si no os alojáis en Harlem, si que tenéis que dedicarle un día a visitarlo. El día más popular para ir es el domingo, ¿porqué? el domingo es el día que hacen las misas góspel. Si si, esas que hemos visto en las películas en las que hay un coro cantando y la gente se levanta alzando las manos al son de la música. Es toda una experiencia, más adelante os hablo en detalle sobre el tema.

¿Qué es lo mejor que ver en Harlem?

125th ST, una de las avenidas más importantes que ver en Harlem

Es el alma del barrio, siempre está animada y llena de gente. Aunque las cadenas de tiendas ya han llegado a esta calle histórica, todavía se pueden ver los vendedores callejeros montando sus puestos y algún predicador augurando el fin del mundo. En la esquina con Malcom X hay un enorme outlet Burlington donde encontraréis verdaderas gangas. Podéis ver aquí más información sobre outlets, incluido este.

El teatro Apollo

En esta calle se encuentra el mítico teatro APOLLO, donde un día a la semana (miércoles si no ha cambiado) se sigue celebrando las Amateur Nights, actuaciones de artistas desconocidos que quieren ser descubiertos. Por este show han pasado celebridades (entonces desconocidas) como Jimi Hendrix o los Jackson 5. Verás que en la entrada del teatro Apollo están las placas con los nombres de los artistas que han pisado ese escenario como Celia Cruz o Louis Amstrong, una especie del “paseo de la fama” pero de este lugar. Como curiosidad, tenéis que saber que aunque asociamos el teatro Apollo con la música jazz y la cultura afroamericana, en sus orígenes fue un cabaré donde solo de permitía el acceso a blancos.

Las casas Brownstones, necesarias que ver en Harlem

Estas casas en tonos marrones (de ahí su nombre) se encuentran entre la 5th Ave y la 7th Ave y de la West 118th a la West 124th. Son viviendas declaras Patrimonio arquitectónico desde los años 70, por eso están tan cuidadas y siguen conservando su encanto. Indispensable dar un paseo entre estas calles.

The studio museum in Harlem

En este museo se exponen obras de artistas afroamericanos, pero no es sólo una galería de arte, si no una representación de las figuras culturales de Harlem. Aquí vienen a admirar las exposiciones, películas o asistir a charlas culturales. Originalmente fue construido como un almacén a finales de los 60  pero posteriormente se empezó a conocer por sus exposiciones, conciertos y conferencias. Poco más de una década después, fue trasladado a su ubicación actual ampliando el espacio.

Malcolm Shabbaz Harlem Market

Este mercado gestionado por la mezquita Malcolm Shabazz comercia con objetos de artesanía, cuero, textiles y productos africanos entre muchas otras cosas. Me quedé con las ganas de visitarlo porque el día que fuimos estaba cerrado, así que si tienes oportunidad, no dudes en verlo porque estoy convencida que será ungular muy curioso.

La universidad de Columbia, imperdible que ver en Harlem

Al oeste de Harlem en Amsterdam Avenue se encuentra la universidad más famosa de Nueva York (o una de ellas) que también es uno de los centros de investigación líderes del mundo, es la Universidad de Columbia. Aunque no pertenece a Harlem, es mejor que la incluyáis en la ruta de ese día por proximidad. Consta de un campus formando un conjunto de edificios donde el alma es su patio principal, rodeado de varias esculturas de estilo neorrenacentista. Es divertido pasear por allí y mezclarte con el ambiente universitario. No sé si os pasará también, pero a mi en Nueva York todo me recuerda a las películas, y este sitio no iba a ser menos.

Consejo para visitarla GRATIS! : Desde la web de la universidad, podéis escuchar gratis (en inglés eso si!) una audioguía para hacer un tour caminando, también hay mapa en pdf disponible.

Ver una misa Góspel, actividad indispensable en Harlem

Cada vez son más los turistas que se animan a asistir a una misa Góspel, y yo no iba a ser menos, así que os voy a contar todo lo que tenéis que saber par asistir a una y qué es una misa Góspel. El Góspel es un estilo musical que inventaron los esclavos que trabajaban en las plantaciones como expresión religiosa. Es de origen afroamericano y hoy en día se ha trasladado a las misas en las iglesias. Es en Harlem donde principalmente acontece este evento y siempre en domingo. Algunas iglesias también lo ofrecen en miércoles, puedes informarte antes ya que seguramente habrá muchos menos turistas. Las misas Góspel se componen de una misa (obviamente) la cual se va interrumpiendo por varias canciones cantadas por coros con letras religiosas. Son muy rítmicas, animadas y algunos tienen voces realmente increíbles. Le ponen mucha emoción y aunque no entiendas la letra, sólo con oír la música y presenciar el ambiente ya te pondrá los pelos de punta. Es toda una experiencia.

¿Dónde puedo ver una misa Góspel?

No todas las iglesias permiten entrar a los turistas, y tampoco todas las que dejan entrar turistas ofrecen la misa igual. Nosotros asistimos a la Abyssinian Baptist Church en el 132 de la calle Odell Clark. La iglesia es muy bonita y grande, además acoge siempre a los turistas, pero las misas duran unas 2h30. Quizá es el único inconveniente que le vi, demasiado larga. Otra opción para ir a ver el Góspel es en el Bethel Gospel Assembly, en el 2 de la calle East 120th St. de la cual he leído buenas opiniones en internet. Cantan unas 4 o 5 canciones entre sermón y sermón, que por cierto, no veas cómo lo viven y que pasión le ponen, tanto el coro como el cura y los feligreses. Yo soy muy curiosa y observadora, y allí es lo que fui a hacer sinceramente. Me fascinó cómo van vestidos de punta en blanco, con sombrero incluido. Ellas todas bien arregladas con sus mejores vestidos, la mayoría negros y de corte clásico. Y ellos en traje de domingo, como manda la tradición.

Consejos para asistir a una misa Góspel

No deja de ser una misa, y aunque acepten turistas, es algo que los feligreses se toman muy en serio, así que sobre todo hay que ser respetuosos. Piden por favor que no se abandone la misa antes de que termine para no interrumpir ni molestar a los asistentes. Sientan a los turistas apartados de los feligreses, estos último se sientan más cerca frente al altar donde el cura da la misa y también se sitúa el coro. Para que no os pille por sorpresa, os voy a contar lo que tenéis que saber antes de ir:

• Aconsejan llevar un código de vestimenta adecuado. Nada de shorts, chancletas, gorras y cosas del estilo. Si vas en invierno no hay problema, pero en verano con el calor que hace en Nueva York evita ir muy “destapado/a” el día que vayas a la misa.
• No permiten entrar mochilas, así que mejor llevar un bolso si eres mujer o una bandolera si eres hombre.
• No permiten hacer fotos ni grabar en vídeo. Siéntate y disfruta la música en directo y no a través de la pantalla del móvil 😉
• No se puede abandonar la misa a medias, se considera una falta de respeto.
• Ya que no hay que pagar entrada y permiten la entrada a turistas, qué menos que dejar un donativo simbólico cuando pasen el cestillo.
• Te darán el pan y el vino, o mejor dicho una oblea y un zumo de uva. No te lo tomes cuando lo cojas, hay que esperar al momento. Tú simplemente fíjate cuando se lo comen los feligreses experimentados e imítales 😉
• Si quieres asegurarte la entrada llega al menos una hora antes. Se forman largas colas y no hay capacidad para todos los turistas.
• Hay una misa a las 8h y otra a las 11h. Piensa que si vas a las 11h tienes que estar a las 10h y sales casi a las 14h, así que ya le has echado la mañana. Conclusión, pégate el madrugón y asiste a la de las 8h para tener más día libre y ver más de Harlem.

COMER Y JAZZ EN HARLEM

Es muy típico hacer un buen brunch en Harlem, sobre todo potente en calorías. Un clásico es Sylvia’s, ¡y no, no es mi restaurante! Está en el 328 de Malcolm X Blvd y es el lugar más autentico donde comerlo, allí va la gente local el domingo tras la misa, así que suele estar bastante abarrotado. Mejor si puedes reservar.

Otra opción el Tom’s Restaurant en el 2880 de Broadway, muy cerca de la Universidad de Columbia. Es un restaurante griego americano  que por fuera tiene un aspecto clásico, de hecho creo que ha aparecido en alguna película. Sirven buenas hamburguesas, gyros griegos bagels o sopas.

Para tomar un cóctel escuchando música jazz en directo, tenéis que ir al Ginny’s Supper Club en el 310 de Malcolm X Blvd, situado en el sótano del restaurante Red Rooster, otro lugar con mucha fama para comer. El domingo hacen un brunch especial con música góspel, así que si no queréis ir a la misa, esta es una opción perfecta.

Mapa para ver Harlem

Con todo esto, tenéis más que suficiente para pasar un día entero en el barrio de Harlem, uno de los que más me gustaron de Nueva York, auténtico y con mucha personalidad. Merece realmente la pena ir al menos un día para recorrerlo, ¡no os defraudará!