Destino preferido entre alemanes e ingleses, pero también de muchos españoles, Mallorca es el lugar ideal para veranear con amigos o en familia. Lo bueno que tiene esta isla es que hay opciones infinitas de diversión y también de tranquilidad. Todo dependerá de lo que quieras hacer durante tu viaje. En Mallorca hay pueblos con encanto, naturaleza de montaña, beach clubs con música para bailar y sobre todo, algunas de las playas y calas más paradisiacas del Mediterráneo. ¿Necesitas más razones para visitar la isla? Pues aquí te traigo 15 lugares que ver en Mallorca y no puedes perderte.
Ciudades y pueblos con encanto que ver en Mallorca
Palma de Mallorca
Comienzo por Palma de Mallorca, la ciudad más grande y su capital. Tanto si llegas en barco como en avión, esta será tu puerta de entrada y salida de la isla.
El primer lugar que llamará tu atención será la bahía de Palma bordeada por el Paseo Marítimo. Tiene unos 5,5km de largo, por eso es el lugar preferido de muchos deportistas para practicar running, patines o simplemente disfrutar en bicicleta. A lo largo de casi todo el paseo se extiende el puerto deportivo. Aquí verás algunos de los lujosos yates que pasan por la isla.
Desde el Paseo Marítimo verás la Catedral de Palma, que si de día es bonita, por la noche iluminada es espectacular. Los alrededores merecen también mucho la pena. Callejea por la parte de atrás, son unas calles estrechas empedradas con casas antiguas y muy auténticas. Continúa por el la Plaça de la Cort, donde está el Ayuntamiento y sigue por barrio de Sant Nicolau. Si te gustan las tiendas de moda o decoración diferente y que no sean de las marcas low cost tan conocidas, aquí tienes unas cuantas que te encantarán. De aquí puedes salir al Paseo del Borne, uno de mis preferidos y más bonitos de Palma.
Otro de los lugares que ver en Mallorca si estás en Palma es el barrio del Molinar. Guarda todo el encanto de pueblo pesquero con las casas de una o dos plantas de colores y el mar delante. Es un lugar con un ambiente muy tranquilo para pasear y dejarse acariciar por la brisa del Mediterráneo.
Y si lo que quieres es fiesta, en el Paseo Marítimo tienes algunas de las discotecas más emblemáticas de Mallorca. También hay bares de copas más pequeños repartidos desde Porto Pi hasta casi llegar a la Catedral ¡no te los acabarás! También en el barrio de Santa Catalina hay un montón de opciones de ocio. Y si lo tuyo no es salir hasta la madrugada no te preocupes. Aquí está de moda el tardeo, que suele comenzar con el vermouth y ya no para la fiesta hasta el día siguiente.
Valldemossa
El pueblo preferido de todos los turistas es Valldemossa. Y no es de extrañar porque es realmente bonito, sin duda uno de los imprescindibles que ver en Mallorca. En plena sierra de la Tramontana se esconde este encantador pueblo de estilo mediterráneo con las calles y casas en piedra. Cuando lo ves de lejos ya sabes que será de esos lugares que no te defraudarán. Es pequeño y lo puedes recorrer rápido, aunque después de varias visitas, puedo asegurar que estarás toda una mañana. Es imposible no parar en cada rincón a hacer fotos. Están adornados con macetas, algunas están puestas una tras otra a lo largo de toda la calle.
Sóller
Aquí vamos a hacer un 2×1, por un lado está Sóller, el pueblo de interior, y por otro lado está el Puerto de Sóller, el pueblo junto al mar. Ambos son unos imprescindibles que ver en Mallorca, así que ten en cuenta ese dato para no dejarte ninguno de los dos.
En Sóller podrás disfrutar del núcleo histórico antiguo mientras paseas por las calles empedradas. Hay dos lugares emblemáticos que visitar, la iglesia neogótica de San Bartomeu y el banco de Sóller. Ambos son obras de Joan Rubid, uno de los discípulos de Gaudí. Uno de los encantos de este lugar son los patios de las casas, con fuentes, pérgolas y azulejos. Intenta tomarte discretamente para no perdértelos.
Los alrededores de Sóller también son bonitos, con campos de naranjos. Siguiendo la carretera llegarás al Puerto de Sóller. Pero hay una forma de llegar más auténtica, con el tren de Sóller. Un antiguo ferrocarril de madera que atraviesa las montañas hasta bajar al puerto. El Puerto de Sóller también es muy turístico, por lo que hay mucha vida y ambiente animado. Es muy colorido y su forma de bahía haciendo un puerto natural es de los lugares que más enamoran.
Fornalutx
Fornalutx también está en la sierra de la Tramontana, y a pesar de ser un pueblo pequeño, es de los imprescindibles que ver en Mallorca por lo bonito que es. Sigue el estilo de los pueblos de montaña de estilo mallorquín, con calles adoquinadas, casas en piedra, colores terracota y ventanas de carpintería verde. Algunos de los lugares por los que pasarás incluso sin pretenderlo serán la Plaza de España, la iglesia, el Ayuntamiento o la torre defensiva del siglo XVII.
Pollença
Al norte de la isla se ubica el encantador pueblo de Pollença. Es una localidad de calles en piedra, llenas de restaurantes, tiendas y cafeterías que rodean a la plaza principal. Fue el lugar escogido por escritores, artistas y músicos que se quedaron aquí a vivir y encontrar su inspiración. Pollença remonta su historia por miles de años, hay datos de que los primero habitantes llegaron hace 3000 años. Otra prueba histórica es el Pont Romá, un puente construido por los romanos. Si quieres contemplar unas bonitas vistas panorámicas, puedes subir hasta el Puig de Pollença, una pequeña montaña en cuya cima se encuentra un monasterio.
Porto Cristo, Portocolom y Portopetro
Todos seguidos en la costa este, estos pueblos se forman alrededor de puertos naturales. Son ideales para disfrutar del verano y bonitos para pasear viendo los barcos y yates atracados. El paseo bordeando el puerto tiene muy buen ambiente. Hay infinidad de restaurantes y bares para comer en un entorno distinguido pero si ser tan caro como Puerto Portals o Puerto Adriano. La ubicación es ideal para disfrutar de las Calas de Mallorca, una zona repleta de estas donde están algunas de las más valoradas de la isla.
Artá
El municipio de Artá conserva su patrimonio histórico y cultural de forma excelente. Es un pueblo tradicional mallorquín que no ha cambiado por no estar demasiado explotado por el turismo. Será cuestión de tiempo que se masifique más puesto que es una de las localidades más bonitas que ver en Mallorca, y bien merece la pena visitarlo. Es además un lugar con historia prehistórica como puede verse en los yacimientos del poblado talayótico de Ses Païsses. Si te gusta la arqueología, aquí podrás sacar el Indiana Jones que llevas dentro.
Alcudia
Alcudia es otro de esos pueblos que tienen el núcleo antiguo en el interior y la parte más nueva y el puerto en la costa. Además cuenta con una playa muy bonita. Pero yo quiero centrarme en la parte antigua de Alcudia, puesto que es uno de los lugares que no te puedes perder en Menorca. El casco antiguo se compone de calles con casas en piedra y carpintería verde, la tradicional mallorquina, y decorada con muchas plantas. Tiene varios monumentos repartidos como las murallas o la puerta de entrada a la villa.
Si te gustan los mercadillos, los martes y los domingos montan el mercado tradicional de Alcudia. En él encontrarás productos variados locales como artesanías, flores, comida y otros. Una forma estupenda de conocer más sobre la cultura local.
Lugares especiales que ver en Mallorca
Formentor
El punto más al norte de la isla es el Cabo de Formentor, un paisaje natural imprescindible que ver en Mallorca. Tras unos 15km por una carretera sinuosa llegarás hasta el Faro de Formentor. Su ubicación es todo un privilegio, en los alto de un acantilado de 210m sobre el nivel del mar. Todo el entorno es alucinante, no te defraudará. Es un lugar bastante turístico así que mejor si puedes llegar temprano. El atardecer también puede resultar otro momento ideal por la bonita luz que se forma. Si quieres una experiencia completa, quédate en alguna de las calas que hay escondidas como Cala Figuera, de agua turquesa, o la propia Playa de Formentor, una de las más bonitas de Mallorca (te cuento de esta playa más abajo).
Sa Calobra
Otro lugar muy peculiar que no te puedes perder en Mallorca es La Calobra. Venir aquí es toda una aventura, comenzando por una carretera que zigzaguea formando uno de los lugares más fotografiados, el Nudo de la Corbata. ¡Puedes imaginarte el nivel de curvas que este tramo para tener ese nombre! De hecho, la carretera hace un giro de 360º en el que pasa por debajo de sí misma, una locura. Al final llegarás al pequeño pueblo de La Calobra con una cala de piedras, un restaurante y poco más. Desde aquí parte un camino por el que podrás llegar al lugar más especial, dos pequeñas playas entre acantilados dentro de una garganta, y divididas por el Torrente de Pareis. ¡Una maravilla de la naturaleza! Es importante tener en cuenta que si vas los meses de verano, en estas aguas suele haber bastantes medusas.
Bosque y cascadas en Orient
En Mallorca no es todo mar y pueblos mediterráneos. También hay lugar para la naturaleza de montaña. Orient es un pueblo de apenas 30 habitantes donde se puede aparcar el coche para comenzar esta sencilla ruta de senderismo. Comienza en campo abierto, pero pronto ya te adentras en el bosque de las montañas de la Tramontana. He de decir que para apreciar este lugar es su belleza máxima, la época ideal para ir es en otoño e invierno. Las cascadas se forman debido a las lluvias, algo poco frecuente en Mallorca. Las más espectacular es Es Salt des Freu. Y como dato curioso, aquí ha sido la única vez que he visto nieve en la isla. Algo que no se da casi nunca, como podrás imaginar.
Playas y Calas que ver en Mallorca
Playa de Muro
En el norte de la isla se encuentra una de las mejores playas de Mallorca. Con arena fina blanca y mar turquesa cristalino, la playa de Muro es de las preferidas de muchos mallorquines. En verano suele estar muy abarrotada puesto que aquí hay una zona de resorts muy turísticos. No obstante, si vas fuera de los meses de temporada alta (julio y agosto), aquí podrás disfrutar de una playa paradisiaca. Sin duda, uno de los imprescindibles de Mallorca.
Playa des Carbó
Aunque parezca imposible se puede encontrar una playa de agua cristalina, arena blanca y con poca gente incluso en verano. La Playa des Carbó es una de ellas y el motivo es que para llegar hay que hacerlo caminando durante unos 30/40 min por un camino. En julio y agosto no es algo que todo el mundo esté dispuesto a hacer con el sol abrasador. Puedes aparcar en la Colonia de Sant Jordi, y desde ahí iniciar el camino hacia el este por la costa. Es una playa bastante larga, así que cuanto más te alejes, menos gente habrá. ¡Ya verás que merecerá mucho la pena!
Cala Marmols
Al igual que la anterior, Cala Es Mármols no es una cala que esté masificada debido a su difícil acceso. Hay que caminar bastante, por lo que es recomendable hacerlo bien tempranito para que el sol no pique. Hay dos formas de llegar, ambas son unos 6 km de camino. La primera es aparcar en en el Faro de Sus Salines y tomar el camino que encontrarás a mano izquierda mirando hacia el mar. La segunda opción es desde la cala S’Almunia, la cual también es súper bonita. En este pasas por unos yacimientos y son unos 6km también. Aunque no tengo foto, puedes ver en Google lo bonita que es, la hora caminando merecerá mucho la pena, es un auténtico paraíso que poca gente conoce.
Playa de Formentor
Como decía más arriba, la Playa de Formentor es una de las mejores que ver en Mallorca. Un planazo es alquilar un velomar (patinete) e ir por la costa hacia el islote de Formentor. Si pasas por el estrecho verás las mansiones que tienen aquí algunos millonarios, como Liliane Bettencourt (principal accionista de L’Oréal Paris). Es también un lugar alucinante para hacer buceo si quieres ver peces enormes.